viernes, 30 de diciembre de 2011

Borges y el peronismo

“La gente decía que Dios era peronista. Qué gusto el de Dios: no me extraña”
“La fealdad de estos lugares (refiriéndose a Avellaneda y Puente Alsina) parece predestinarlos para Perón y el peronismo”
"Los peronistas no son ni buenos, ni malos; son incorregibles"
"Los peronistas son gente que se hace pasar por peronista para sacar ventaja"
"Las dictaduras fomentan la opresión, las dictaduras fomentan el servilismo, las dictaduras fomentan la crueldad; más abominable es el hecho de que fomenten la idiotez. Botones que balbucean imperativos, efigies de caudillos, vivas y mueras prefijados, ceremonias unánimes, la mera disciplina usurpando el lugar de la lucidez... Combatir estas tristes monotonías es uno de los muchos deberes del escritor"
"Un joven se ofrece a ayudarlo a cruzar la Nueve de Julio, en mitad de la avenida, el joven le dice a Borges "disculpe maestro, pero le tengo que decir... soy peronista, Borges respondió diciendo: "¡No se preocupe!, yo también soy ciego"

miércoles, 28 de diciembre de 2011

El niño proletario (Osvaldo Lamborghini, fragmento)

Los despojos de ¡Estropeado! ya no daban para más. Mi mano los palpaba mientras él me lamía el falo. Con los ojos entrecerrados y a punto de gozar yo comprobaba, con una sola recorrida de mi mano, que todo estaba herido ya con exhaustiva precisión. Se ocultaba el sol, le negaba sus rayos a todo un hemisferio y la tarde moría. Descargué mi puño martillo sobre la cabeza achatada de animal de ¡Estropeado!: él me lamía el falo. Impacientes Gustavo y Esteban querían que aquello culminara para de una buena vez por todas: Ejecutar el acto. Empuñé mechones del pelo de ¡Estropeado! y le sacudí la cabeza para acelerar el goce. No podía salir de ahí para entrar al otro acto. Le metí en la boca el punzón para sentir el frío del metal junto a la punta del falo. Hasta que de puro estremecimiento pude gozar. Entonces dejé que se posara sobre el barro la cabeza achatada de animal.
—Ahora hay que ahorcarlo rápido —dijo Gustavo.
—Con un alambre —dijo Estebanñ en la calle de tierra don de empieza el barrio precario de los desocupados.
—Y adiós Stroppani ¡vamos! —dije yo.
Remontamos el cuerpo flojo del niño proletario hasta el lugar indicado. Nos proveímos de un alambre. Gustavo lo ahorcó bajo la luna, joyesca, tirando de los extremos del alambre. La lengua quedó colgante de la boca como en todo caso de estrangulación.

martes, 27 de diciembre de 2011

Michel Foucault, homenaje a un vago y maleante (Jesús Ibáñez, fragmento)

RECUPERANDO LA (MI) MEMORIA.- "El pensamiento es tarea de vagos y maleantes. Hay que saber perderse para trazar un mapa: vagar por los márgenes y por el desierto, fuera de las fortalezas en las que están encerrados la verdad, el bien y la belleza. Sólo los nómadas descubren otros mundos. Hay que saber pervertir la ley (jugar con ella) y a veces subvertirla (ponerla en cuestión) para cambiar y/o quitar la ley: provocar malos pensamientos en los bien-pensantes, asediar las sedes de la verdad, el bien y la belleza. Sólo los malditos mejoran este mundo"

lunes, 26 de diciembre de 2011

Alicia en el pais de las maravillas (Lewis Carroll, fragmento)

- Pero es que a mí no me gusta tratar a gente loca
- Oh, eso no lo puedes evitar. Aquí todos estamos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca.
- ¿Cómo sabes que yo estoy loca?
- Tienes que estarlo, o no habrías venido aquí.

sábado, 24 de diciembre de 2011

El cadáver imposible (José Pablo Feinman, fragmento)

No soy el protagonista de esta historia, pero soy su más privilegiado testigo. Y, en cuanto tal, seré su narrador. El narrador de esta historia, nada menos. Se preguntará usted, entonces, ¿qué historia es ésta? Se lo diré: es la historia de una seducción. Escribo para mentirle, para deslumbrarlo, para seducirlo. He aquí mi programa literario: quiero estar en su prestigiosa antología y no ahorraré una sola gota de sangre para lograrlo. Comienzo, por consiguiente, el vertiginoso relato de los crímenes que cautivarán su conciencia.

viernes, 23 de diciembre de 2011

ADAN BUENOSAYRES - Prólogo Indispensable (Leopoldo Marechal)

En cierta mañana de octubre de 192., casi al mediodía, seis hombres nos internábamos en el cementerio de Oeste, llevando a pulso un atúd de modesta factura (cuatro tablitas frágiles) cuya levedad era tanta, que nos parecia llevar en su interior, no la vencida carne de un hombre muerto, sino la materia sutil de un poema concluido. El astrólogo Schultze y yo empuñabamos las manijas de la cabecera, Franky Amundsen y Del Solar habían tomado las de los pies: al frente avanzaba Luis Pereda, fortachón y bamboleante como un jabalí ciego; detrás iba Samuel Tesler, exhibiendo un gran rosario de cuentas negras que manoseaba con ostentosa devoción. La primavera reía sobre las tumbas, cantaba en el buche de los pájaros, ardía en los retoños vegetales, proclamaba entre cruces y epitafios su jubilosa incredulidad acerca de la muerte. Y no había lágrimas en nuestros ojos ni pesadumbre alguna en nuestros corazones; porque dentro de aquel ataúd sencillo (cuatro tablitas frágiles) nos parecía llevar no la pesada carne de un hombre muerto, sino la materia leve de un poema concluido. Llegamos a la fosa recién abierta: el ataúd fue bajado hasta el fondo. Redoblaron primero sobre la caja los terrones amigos, y a continuación las paladas brutales de los sepultureros. Arrodillado sobre la tierra gorda, Samuel Tesler oró un instante con orgullosos impudor, mientras que los enterradores aseguraban en la cabecera de la tumba una cruz de metal en cuyo negro corazón de hojalata se leía lo siguiente: 
ADAN BUENOSAYRES

R.I.P.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Respiración artificial (Ricardo Piglia, fragmento)

Alguien, un crítico ruso, el crítico ruso Iuri Tinianov, afirma que la literatura evoluciona de tío a sobrino (y no de padres a hijos).

miércoles, 21 de diciembre de 2011

La sociedad abierta y sus enemigos” (Karl R. Popper, fragmento)

No puede haber historia de «el pasado tal como ocurrió en la realidad», sólo puede haber interpretaciones históricas y ninguna de ellas definitiva; y cada generación tiene derecho a las suyas propias. Si pensamos que la historia progresa o que debemos progresar, cometemos entonces el mismo error que quienes creen que la historia tiene un significado que sólo resta descubrir y que no es necesario darle, pues progresar es avanzar hacia un fin determinado. La «historia» no puede hacer eso, sólo nosotros, individuos humanos, podemos hacerlo. Y podemos hacerlo defendiendo y fortaleciendo aquellas instituciones democráticas de las que depende la libertad y, con ella, conscientes del hecho de que el progreso reside en nosotros, en nuestro desvelo, en nuestros esfuerzos, en la claridad con que concibamos nuestros fines y en el realismo con que los hayamos elegido.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Carta de Macedonio Fernández a Borges

Iré esta tarde y me quedaré a cenar si hay inconvenientes y estamos con ganas de trabajar. (Advertirás que las ganas de cenar las tengo aún con inconvenientes y sólo falta asegurarme las otras). Tienes que disculparme no haber ido anoche. Soy tan distraído que iba para allá y en el camino me acuerdo de que me había quedado en casa. Estas distracciones frecuentes son una vergüenza y me olvido de avergonzarme también. Estoy preocupado con la carta que ayer concluí y estampillé para vos; como te encontré antes de echarla al buzón tuve el aturdimiento de romperle el sobre y ponértela en el bolsillo: otra carta que por falta de dirección se habrá extraviado. Muchas de mis cartas no llegan, porque omito el sobre o las señas o el texto. Esto me tiene tan fastidiado que rogaría que se viniera a leer mi correspondencia en casa. Su objeto es explicarle que si anoche vos y Pérez Ruiz en busca de Galíndez no dieron con la calle Coronda, debe ser creo, porque la han puesto presa para concluir con los asaltos que en ella se distribuían de continuo. A un español le robaron hasta la zeta, que tanto la necesitan para pronunciar la ese y aún para toser. Además, los asaltantes que prefieren esa calle por comodidad, quejáronse de que se la mantenía tan oscuro que escaseaba la luz para su trabajo y se veían forzados a asaltar de día, cuando debían descansar y dormir. De modo que la calle Coronda antes era ésa y frecuentaba ese paraje, pero ahora es otra; creo que atiende al público de 10 a 4, seis horas. Lo más del tiempo lo pasa cruzada de veredas en algunas de las casas; quizá anoche estaba metida en lo de Galíndez: ese día le tocó a él vivir en la calle. Es por turnos y éste es el de que yo me calle.

A propósito de Casablanca (Fragmento de la carta de Groucho Marx a los hermanos Warner)

Cuando los Hermanos Marx estaban por sacar la película "Una noche en Casablanca" recibieron una amenaza legal de la compañía Warner por el uso de "Casablanca" en el título. Esta es la respuesta que envió Groucho.

Queridos Warner Brothers:
"Ustedes reivindican su Casablanca y pretenden que nadie más pueda utilizar ese conmbre sin permiso. ¿Qué me dicen deWarner Brothers? ¿Es de su propiedad, también? Probablemente tengan ustedes el derecho de utilizar el nombre deWarner, pero, ¿y el de Brothers? Profesionalmente, nosotros éramos Brothers mucho antes que ustedes. Hacíamos ya la ronda de las candilejas como The Marx Brothers cuando la Vitaphone era todavía un simple destello en el ojo del inventor, e incluso antes de nosotros ha habido otros hermanos: los Smith Brothers [fabricantes de pastillas para la tos], los Karamazov Brothers; Dan Brothers, un centrocampista del Detroit; y Brother, can you spare me a dime? (que originalmente se llamaba BrotherS, can you spare me a dime? pero esto era reducir demasiado la moneda, así que despacharon a un hermano, dieron todo el dinero al otro y lo dejaron en Brother, can you spare me a dime?)."

domingo, 18 de diciembre de 2011

Para llegar de verdad a Madrid - Lunes 18 de noviembre de 2002 - Roberto Bolaño (Entre Paréntesis)

Bien mirado, vivir o estar en Madrid no se diferencia mucho de vivir o estar en Tacuarembó. El aire, tal vez, es diferente. Su claridad, en ocasiones, ciega el alma para que veamos con mayor claridad las cosas: las calles conjeturales, esa jerga dialectal del castellano que tan bien hablan en la vieja capital de la madre patria. Y las mujeres, las hijas del pueblo de Madrid, es decir las rubias y las morenas, añaden misterio a una materia ya rica en misterio, aunque es bien sabido que los hispanos, como los hispanoamericanos, no sólo tuvimos una educación portentosamente mala sino que además somos malos para la cama.

Palabras desordenadas

Sgeun etsduios raleziaods por una Uivenrsdiad Ignlsea,no ipmotra el odren en el que las ltears etsen ecsritas,la uicna csoa ipormtnate es que la pmrirea y la utlima ltera esetn ecsritas en la psiocion cocrreta. El retso peuden etsar ttaolmntee mal y aun pordaslerelo sin pobrleams, pquore no lemeos cada ltera en si msima snio cdaa paalbra en un contxetso. Presnoamelnte, estome preace icrneilbe!
La ptua mrade que lo pairo! Tnatos aoñs de colgeio a la mrieda!

viernes, 16 de diciembre de 2011

Religión (Steven Weinberg)

"En el mundo siempre habrá gente buena haciendo cosas buenas y gente mala haciendo cosas malas, pero para que haya gente buena haciendo cosas malas hace falta la religión".

jueves, 15 de diciembre de 2011

Civilizaciones menos violentas (Steven Pinker)

En un artículo para Nature , Pinker asegura que si se cuantificaran las muertes ocurridas en esos tiempos por imperios que colapsaban, maníacos conquistadores, ventas de esclavos y aniquilaciones de pueblos nativos, serían comparables a las causadas por cada una de las dos guerras mundiales. "La arqueología y la demografía etnográfica sugieren que alrededor del 15% de las personas que vivían en sociedades en las que no se había constituido el Estado morían violentamente. Sería cinco veces la proporción de ese tipo de decesos que se registró en el siglo XX por la guerra, el genocidio y las hambrunas por causas humanas combinados", escribe. Y más adelante se pregunta: "¿Por qué nos llevó tanto tiempo darnos cuenta de que había algo un tanto mal con comprar y vender esclavos, pegarles a los chicos, violar a las mujeres, apresar a homosexuales, exterminar a indígenas o hacer la guerra para reparar la vanidad ofendida de los reyes?". Su respuesta es que ahora somos más pacíficos porque somos más inteligentes. "Las neurociencias indican que la moralidad no sólo se controla por los circuitos de la emoción -dice-, sino también por los del pensamiento abstracto."

miércoles, 14 de diciembre de 2011

El idioma analítico de John Wilkins (J.L.Borges)

El doctor Franz Kuhn menciona cierta enciclopedia china que se titula "Emporio celestial de conocimientos benévolos". En sus remotas páginas está escrito que los animales se dividen en (a) pertenecientes al Emperador, (b) embalsamados, (c) amaestrados, (d) lechones, (e) sirenas, (f) fabulosos, (g) perros sueltos, (h) incluidos en esta clasificación, (i) que se agitan como locos, (j) innumerables, (k) dibujados con un pincel finísimo de pelo de camello, (l) etcétera, (m) que acaban de romper el jarrón, (n) que de lejos parecen moscas.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Tirar demasiado de la cuerda (Woody Allen)

El viernes desperté y, como el universo está en expansión, tardé más de lo habitual en encontrar mi bata. Por este motivo salí con retraso para ir al trabajo y, como el concepto de arriba y abajo es relativo, el ascensor en el que entré subió a la azotea, donde fue muy difícil parar un taxi. No olvidemos que un hombre que viajara en un cohete casi a la velocidad de la luz sin duda habría podido llegar a tiempo al trabajo, o quizás incluso un poco antes, y sin duda mejor vestido. Cuando por fin llegué a la oficina y fui hacia mi jefe, el señor Muchnik, para explicar la demora, mi masa aumentó conforme aceleraba para acercarme a él, lo que él interpretó como señal de insubordinación. Tras cruzar unas palabras enconadas, me aseguró que me descontaría ese tiempo del sueldo, que, en comparación con la velocidad de la luz, es de todos modos muy pequeño. La verdad es que si tomamos como referencia la cantidad de átomos de la galaxia Andrómeda, en realidad gano poquísimo. Intenté decírselo al señor Muchnik, quien me contestó que yo pasaba por alto que el tiempo y el espacio eran la misma cosa. Y juró que si esa situación cambiaba, me concedería un aumento. Señalé que si tenemos en cuenta que el tiempo y el espacio son una misma cosa, y que se tarda tres horas en hacer algo que resulta tener menos de 15 centímetros de longitud, ese algo no puede venderse por más de cinco dólares. Lo bueno de que el espacio sea lo mismo que el tiempo es que, si viajas a los confines del universo y el trayecto dura tres mil años terrestres, cuando vuelvas tus amigos habrán muerto, pero no necesitarás Botox.

La Soledad (Arthur Schopenhauer)

El hombre inteligente busca una vida tranquila, modesta, defendida de infortunios; y si es un espíritu muy superior, escogerá la soledad. La soledad es el patrimonio de todas las almas extraordinarias. Nadie puede salir de su individualidad. La soledad ofrece al hombre colocado a gran altura intelectual una doble ventaja: estar consigo mismo y no estar con los demás.

El sentimiento de lo fantástico (Julio Cortázar)

Ese sentimiento, que creo que se refleja en la mayoría de mis cuentos, podríamos calificarlo de extrañamiento; en cualquier momento les puede suceder a ustedes, les habrá sucedido, a mí me sucede todo el tiempo, en cualquier momento que podemos calificar de prosaico, en la cama, en el ómnibus, bajo la ducha, hablando, caminando o leyendo, hay como pequeños paréntesis en esa realidad y es por ahí, donde una sensibilidad preparada a ese tipo de experiencias siente la presencia de algo diferente, siente, en otras palabras, lo que podemos llamar lo fantástico. Eso no es ninguna cosa excepcional, para gente dotada de sensibilidad para lo fantástico, ese sentimiento, ese extrañamiento, está ahí, a cada paso, vuelvo a decirlo, en cualquier momento y consiste sobre todo en el hecho de que las pautas de la lógica, de la causalidad del tiempo, del espacio, todo lo que nuestra inteligencia acepta desde Aristóteles como inamovible, seguro y tranquilizado se ve bruscamente sacudido, como conmovido, por una especie de, de viento interior, que los desplaza y que los hace cambiar.

domingo, 11 de diciembre de 2011

El valor del librepensamiento (Sobre Dios y la religión) Bertrand Russell.

"Librepensamiento" significa pensar libremente, por lo menos tan libremente como le es posible a un ser humano. (...) ¿De qué está libre el pensador? Para ser digno de ese nombre debe estar libre de dos cosas: la fuerza de la tradición y la tiranía de sus propias pasiones. Nadie está totalmente libre de ambas cosas, pero en la medida que un hombre puede emanciparse merece ser llamado librepensador (...) La libertad que busca el librepensador no es la libertad total de la anarquía, sino libertad dentro de la ley intelectual. No se inclinará ante la autoridad de otros ni cederá a sus propios deseos, sino que se someterá a la evidencia. Si se le demuestra que está equivocado cambiará de opinión; si se le facilita un nuevo hecho, abandonará, si es necesario, incluso sus teorías más preciadas. Eso no es para él una esclavitud, dado que tiene el deseo de saber, y no de entregarse a caprichosas fantasías.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Don Miguel de Unamuno

Cuanto menos se lee, más peligroso es lo que se lee.

El fascismo se cura leyendo y el racismo se cura viajando.

viernes, 9 de diciembre de 2011

La muerte de Borges (Adolfo Bioy Casares)

Almorcé en La Biela, con Francis. Después decidí ir hasta el quisco de Ayacucho y Alvear, para ver si tenía Un experimento con el tiempo. Quería un ejemplar para Carlos Pujol y otro para tener de reserva. Un individuo joven, con cara de pájaro, que después supe que era el autor de un estudio sobre Eddas que me mandaron hace meses, me saludó y me dijo, como excusándose: "Hoy es un día muy especial". Cuando por segunda vez dijo esa frase le pregunté: "¿Por qué?". "Porque falleció Borges. Esta tarde murió en Ginebra", fueron sus exactas palabras. Seguí mi camino. Pasé por el quiosco. Fui a otro de Callao y Quintana, sintiendo que eran mis primeros pasos en un mundo sin Borges. Que a pesar de verlo tan poco últimamente yo no había perdido la costumbre de pensar: "Tengo que contarle esto. Esto le va a gustar. Esto le va a parecer una estupidez". Pensé: "Nuestra vida transcurre por corredores entre biombos. Estamos cerca unos de otros, pero incomunicados. Cuando Borges me dijo por teléfono desde Ginebra que no iba a volver y se le quebró la voz y cortó, ¿cómo no entendí que estaba pensando en su muerte? Nunca la creemos tan cercana. La verdad es que actuamos como si fuéramos inmortales. Quizá no pueda uno vivir de otra manera. Irse a morir a una ciudad lejana… tal vez no sea tan inexplicable. Cuando me he sentido muy enfermo a veces deseé estar solo: como si la enfermedad y la muerte fueran vergonzosas, algo que uno quiere ocultar".

La lengua del Tercer Reich (Victor Klemperer)

El nazismo se introducía más bien en la carne y en la sangre de las masas a través de palabras aisladas, de expresiones, de formas sintácticas que imponía repitiéndolas millones de veces y que eran adoptadas de forma mecánica e inconsciente. El lenguaje no sólo crea y piensa por mí, sino que guía a la vez mis emociones, dirige mi personalidad psíquica, tanto más cuanto mayores son la naturalidad y la inconsciencia con que me entrego a él.

Diálogo sobre un diálogo (Jorge Luis Borges)

A- Distraídos en razonar la inmortalidad, habíamos dejado que anocheciera sin encender la lámpara. No nos veíamos las caras. Con una indiferencia y una dulzura más convincentes que el fervor, la voz de Macedonio Fernández repetía que el alma es inmortal. Me aseguraba que la muerte del cuerpo es del todo insignificante y que morirse tiene que ser el hecho más nulo que puede sucederle a un hombre. Yo jugaba con la navaja de Macedonio; la abría y la cerraba. Un acordeón vecino despachaba infinitamente la Cumparsita, esa pamplina consternada que les gusta a muchas personas, porque les mintieron que es vieja... Yo le propuse a Macedonio que nos suicidáramos, para discutir sin estorbo.

Z (burlón)- Pero sospecho que al final no se resolvieron

A (ya en plena mística)- Francamente no recuerdo si esa noche nos suicidamos.

Bertrand Russell y la religión

Mi idea de la religión es la de Lucrecio. La considero una enfermedad nacida del miedo y una fuente de miseria para la humanidad. No puedo negar, sin embargo, que ha hecho algunas contribuciones a la civilización. En días lejanos ayudó a arreglar el calendario, y permitió a los monjes egipcios crear crónicas de los eclipses que acabaron permitiendo predecirlos. Estoy dispuesto a reconocer estas dos aportaciones, pero no se me ocurren más.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Sun Tzu - El Arte de la Guerra

El arte de la guerra se basa en el engaño. Por lo tanto, cuando es capaz de atacar, ha de aparentar incapacidad; cuando las tropas se mueven, aparentar inactividad. Si está cerca del enemigo, ha de hacerle creer que está lejos; si está lejos, aparentar que se está cerca. Poner cebos para atraer al enemigo.

Nabokov: Así empieza Lolita

Lolita, luz de mi vida, fuego de mis entrañas. Mi pecado, mi alma. Lo-li-ta: la punta de la lengua emprende un viaje de tres pasos desde el borde del paladar para apoyarse, en el tercero, en el borde de los dientes. Lo.Li.Ta.

Era Lo, sencillamente Lo, por la mañana, un metro cuarenta y ocho de estatura con pies descalzos. Era Lola con pantalones. Era Dolly en la escuela. Era Dolores cuan­do firmaba. Pero en mis brazos era siempre Lolita.

martes, 6 de diciembre de 2011

La contracultura es un mito comercial

"La contracultura se convirtió en un símbolo de la obsolescencia. De la creatividad. La creatividad es la ideología del turbocapitalismo. O, si se prefiere, del neoliberalismo. El capitalismo es muy creativo. Se ve como una gran fuerza creativa. Siempre está inventado esos maravillosamente nuevos mecanismos para innovar las finanzas. La contracultura también es un símbolo de la creatividad sin límites" (Thomas Frank)

Ruptura

‎"Quien conduciéndose anormalmente grita sin cesar que es normal, despierta la sospecha de que carece de la intuición de su enfermedad. Le propongo entonces romper ya mismo nuestras relaciones privadas". (carta de Freud a Jung, 1912)

Genialidad

Lo específico de los grandes creadores es el pensamiento involucrado en la producción de su obra: utilizan un pensamiento "anticonvencional o divergente, que se aleja de los esquemas de uso habitual; resuelven temas complicados por una vía inesperada. Son personas que logran crear un punto de vista nuevo, distinto, original. Ven lo que los otros no ven". Además, aunque la creación es un terreno que transitan muchos, no todos son capaces de soportar el proceso de transformación capaz de "organizar un cosmos". (Héctor Fiorini, médico psiquiatra director del Centro de Estudios en Psicoterapias de Buenos Aires)

Comunidad - Franz Kafka

Somos cinco amigos, hemos salido uno detrás del otro de una casa; el primero salió y se colocó junto a la puerta; luego salió el segundo, o mejor se deslizó tan ligero como una bolita de mercurio, y se situó fuera de la puerta y no muy lejos del primero; luego salió el tercero, el cuarto y, por último, el quinto. Al final formábamos una fila. La gente se fijó en nosotros, nos señalaron y dijeron: «Los cinco acaban de salir de esa casa». Desde aquella vez vivimos juntos. Sería una vida pacífica, si no se injiriera continuamente un sexto. No nos hace nada, pero nos molesta, lo que es suficiente. ¿Por qué quiere meterse donde nadie lo quiere? No lo conocemos y tampoco queremos acogerlo entre nosotros. Si bien es cierto que nosotros cinco tampoco nos conocíamos con anterioridad y, si se quiere, tampoco ahora, lo que es posible y tolerado entre cinco, no es posible ni tolerado en relación con un sexto. Además, somos cinco y no queremos ser seis. Y qué sentido tendría ese continuo estar juntos. Tampoco entre nosotros cinco tiene sentido, pero, bien, ya estamos juntos y así permanecemos, pero no queremos una nueva unión, y precisamente a causa de nuestras experiencias. ¿Cómo se le podría enseñar todo al sexto? Largas explicaciones significarían ya casi un a acogida tácita en el grupo. Así, preferimos no aclarar nada y no le acogemos. Si quiere abrir el pico, lo echarnos a codazos, pero si insistimos en echarlo, regresa.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Contra la Religión (Christopher Hitchens)

Ahora a la religión le pasa algo gravísimo: fuera de los lugares donde todavía puede hacerse valer mediante el miedo superpuesto a la ignorancia, se ha convertido en una opinión entre tantas. Se ve obligada a competir en el mercado libre de las ideas, y aunque luche por conservar la antigua ventaja de inculcar sus enseñanzas a los niños (por razones demasiado obvias como para tener que subrayarlas), debe someterse a un debate abierto y exponerse al libre análisis. En el verano de 2007 yo estaba en un estudio de Dublín, debatiendo con un portavoz laico de la Iglesia Católica romana, que resultó ser el único cristiano creyente entre los cinco contertulios. Era un polemista de gran finura dialéctica, simpático y bastante modesto, que después del programa estuvo encantado de ir a tomar algo, y de repente me dio un poco de pena. En Irlanda, hace una generación, la Iglesia no se tenía que rebajar así. Sólo con que levantase un poquito la voz, era obedecida de inmediato por el Parlamento, los colegios y los medios de comunicación. Podía prohibir el divorcio, la contracepción, la publicación de ciertos libros y la expresión de ciertas opiniones, y lo hacía. Ahora está desacreditada y en decadencia. Las doctrinas absolutas de antes ahora parecen ridículas. Gran parte de este éxito se debe a la existencia de libros, casetes y DVDs accesibles y bien hechos sobre los triunfos de la ciencia y la razón; también, naturalmente, a que las personas civilizadas cada vez tienen más claro que el principal enemigo al que nos enfrentamos es de origen religioso.

Consejos a un principiante para enfrentarse a la página en blanco (Enrique Vila-Matas)

Tratar de driblar a la plúmbea tradición acumulada y buscar percepciones, ideas nuevas. Ahora bien, para driblar es necesario haber leído previamente mucho. Puede parecer paradójico, pero sólo habiendo leído mucho se puede intentar la aventura de ir en busca de la frescura, del gesto que devuelva al arte la potencia que tuvo en sus orígenes. Por eso me sorprenden los escritores jóvenes que dicen escribir sin previamente haber leído demasiado. A los que dicen pasar de Dickens y Proust quiero advertirles que, como la escritura es una carrera de fondo, a la larga pueden quedarse sin una bombilla en su cerebro literario y convertirse en dibujante de cómics, pero no en escritores. En resumen: se recomienda leer y ser contemporáneos. Esto último parece obvio, pero téngase en cuenta que en la literatura española algo tan simple como ser contemporáneo ha sido generalmente una rareza.

Anotación de Kafka en su diario (2 de Agosto de 1914).

"Alemania le ha declarado la guerra a Rusia. Por la tarde fui a nadar".

Vargas Llosa, sobre “los hombres que no amaban a las mujeres”

A poco de comenzar la novela descubrí sus costuras, incoherencias, fallas en los puntos de vista, la invención del narrador y del tiempo, todo aquello que el lector inocente (el "lector-hembra" lo llamaba Cortázar para escándalo de las feministas) no percibe, lo que le permite disfrutar más y mejor que el lector-crítico de la ilusión narrativa.

Revelación

Hay enfermedades cuyo primer síntoma es la muerte.

Soñé con ella

Caminábamos juntos por aquel camino que bordeaba el mar. Al despertar la descubrí a mi lado. Serena tras la confesión de anoche, tranquila tras la discusión final. Intenté volver a dormirme para recuperar el sueño feliz. Lo logré. Volvimos al camino y al borde del mar. Al terminar el recorrido un coche aguardaba. Ella corrió hacia él. Alcancé a vislumbrar el beso en la boca y la partida veloz.

"Carnage", de Polansky

Nada es previsible, cada situación y cada gesto van preparando sutilmente la tormenta. El educado juego dialéctico, la cortesía aparentemente natural, las despedidas que como en "El ángel exterminador" nunca tienen final, la violencia soterrada, la subterránea lucha de clases, la representación y las máscaras, la hilarante catarsis y el incontenible desmadre cuando se cruzan las barreras están admirablemente expresados por Polanski con comicidad perversa e higiénica mala leche, con la sensación de que este creador controla al milímetro cada elemento de su material.

Re-escribir la historia

‎"Quien controla el pasado, controla el futuro, quien controla el presente, controla el pasado". En la novela de George Orwell "1984", recuerdo, hay cuatro ministerios. Uno de ellos, el "Ministerio de la Verdad", tiene como cometido reescribir la historia manipulando o destruyendo los documentos históricos de todo tipo (fotografías, libros y periódicos), para conseguir que las evidencias del pasado coincidan con la versión oficial de la historia, que es la mantenida por el Estado. 

Campo de distorsión de la realidad

Walter Isaacson dedica muchas páginas de su voluminosa biografía de Steve Jobs a describir el campo de distorsión de la realidad que el fallecido fundador de Apple producía en su entorno. El término lo había importado su ingeniero Bud Tribble de la serie televisiva Star Trek, donde los alienígenas eran capaces de crear mundos a su medida con el exclusivo poder de la mente. “En su presencia”, decía Tribble sobre Jobs, “la realidad es algo maleable. Puede convencer a cualquiera prácticamente de cualquier cosa. El efecto se esvanece cuando no está, pero es peligroso quedar atrapado en su campo de distorsión”.